Miedo y medio es una entrada de blog que por una parte es un cómputo de reflexiones y por otra una crítica literaria de una libro muy conocido: El Diario de Ana Frank.
Para aquellos que no hayan leído el susodicho libro os comento que se trata del diario personal de una niña judía de 13 años que en 1942 se ve obligada a esconderse en un anexo secreto de la oficina de su padre en Amsterdam. Pasará los siguientes dos años de su vida escondida con sus padres y hermana, con la famiia Van Daan y con el señor Dussel viviendo situaciones de temor y tambien de esperanza con las noticias del avance de la guerra.
En su diario Ana deja ver su enorme maduración para su edad debido a sus circunstancias especiales de tal forma que llega a conclusiones personales parecidas o similares a las que yo he podido llegar a mis 23 años. Vienen reflejados sus miedos infantiles y propios de su edad entremezclados con una valentía personal impresionante cuando se refiere a su situación real como judía escondida, además todo relatado en gran medida muy estilosamente, aunque alguna entrada se ve que debía estar aburrida y escribía sobre cualquier cosa.
Ana estuvo dos años de su vida muerta de miedo escondida en aquel anexo y sin embargo fue capaz de por momentos ser feliz e incluso reir, mantener su mente cultivada y hasta disfrutar del amor.
Personalmente me ha hecho pensar varias cosas y aunque algunas son tópicos extremadamente conocidos muchas veces no los aplicamos o los aplicamos mal.
Primero el miedo es natural y las personas tienen y tendran siempre miedo pero eso no puede justificar tus acciones en última medida; sin embargo sería bueno tenerlo en cuenta, o más bien que te lo tengan en cuenta. A día de hoy varias personas han alcanzado un estado miedoso para conmigo lo que me ha generado muchas veces irascibilidad y pena sin embargo ahora cuando pienso en aquella gente que me conoce extremadamente bien y que por lo sucedido a lo largo de este tiempo teme retomar el contacto íntimo conmigo no le culpo, aunque en un ataque de vanidad valiente creo que no deberían dejarse llevar por sus miedos al igual que yo debería hacer lo mismo.
Por otra parte me acordé de un topicazo como es que siempre hay gente que estará peor que tu y aunque eso no es consuelo siempre hay que tenerlo en mente para decir "si ellos pudieron... yo puedo, si ellos salieron yo saldré"...
El miedo nos impulsa a ser personas despreciables, a errar, nos conduce a accionar nuestros mecanismos de protección que muchas veces son como armas que disparan contra almas de la gente que te conoce. Hasta hace poco yo me pase de tuerca, estaba con miedo y medio en el cuerpo y eso se notó en mi vida y se notará en mi futuro.
Lo hecho hecho está y mi lucha tiene que ser contra el miedo, como Ana salvando las distancias evidentemente, y solo así podremos avanzar aunque no conozcamos el destino final. Y aquellos que me temen que luchen contra su miedo porque si miran en sus corazones veran que al igual que yo los hecho de menos ellos creo tambien deben de hecharme algo de menos.
Aconsejo que lean ese libro y piensen sobre él, paladeen cada palabra por que en muchos pasajes todos podemos sentirnos medianamente identificados.
1 comentario:
No lo he leido; pero...quiero decir que siempre es mejor medio que cuarto y mitá (y si no es mejor...por lo menos si más concreto).
Supongo que los miedos acechan en cada recodo del pedregoso camino, no solo hay que saber enfrentarse, a veces, hay que saber salirse un poco del camino.
Un biko
Publicar un comentario