Nuevo pero viejo, diferente pero manteniendo la costumbre, realista y de ficción emocional pero sin imponer la razón
lunes, 24 de octubre de 2011
El regreo al Principio: Capítulo II: Igualdad
La estación más cercana a la Tierra será Fraternidad. Esta estación es un complejo de dos anillos sobre un mismo eje rotacional. El primero girará transversalmente sobre el eje y estará enteramente ocupado por granjas auto sostenidas y cultivos hidropónicos. Otro anillo girará elípticamente sobre el primero y se compondrá de cinco módulos habitables que conformarán por si solos unidades independientes para el mantenimientos de la vida y sociedad humana en el espacio.
El movimiento de los dos anillos dotará de gravedad a todo el complejo evitando los enormes costes energéticos que supondría mantener una célula de gravedad artificial funcionando para un complejo de tales dimensiones.
La estación está preparada para mantener a 20000 personas y cada uno de los módulos es una unidad independiente y separable de la estación pero conforman un enorme complejo que estará dotado del procesador más potente jamás creado por la mente humana, E.L.I.A: Una inteligencia virtual que se ocupará de las funciones administrativas del sistema, los sistemas vitales de Fraternidad y, sobretodo, supervisará las Cámaras de Incubación Humana.
Por último, debido a su cercanía a la atmósfera terrestre, tendrá la función de enviar cada cincuenta años las Unidades de Análisis Exhaustivo con la que los integrantes de la estación Libertad trabajaran y deliberaran finalmente el momento de regresar a la Tierra.
Fragmento del discurso del Dr. Emira Paulov
Jefe conjunto del Proyecto LIFE, expuesto en
la sede de la ONU, New York año 2077.
Un hombre rechoncho bajo una luz tenue y con un vaso de whisky en su mano dejó de leer la lámina visualizadora y miró al techo de su pequeño habitáculo…
“El Gran Regreso… así es como lo llamamos, pero el tiempo transcurre y nunca llega ese día… y los padres mueren y los hijos ocupan sus puestos de vigilantes de la Tierra… Vigilamos y esperamos, vigilamos y esperamos….”
Vic Fontaine bebió un trago de whisky y se recostó en su sillón. El whisky era un bien escaso ya que solo se permitía la plantación de malta cada veinte años y no toda se usaba para realizar esta bebida. Solo unas pocas personas llegaban a probarlo en su vida y muchas menos podían permitirse el lujo de beberse media botella una noche en la que todo parecía oscuro y desesperanzador, una de estas personas era el Director General de la Estación Libertad, el susodicho Vic Fontaine.
Vic dirigió torpemente su enorme y borracho cuerpo a la cama con la esperanza de conseguir conciliar un sueño mejor que sus pensamientos.
- Janis… ¿quieres decir que hay vida humana en la Tierra y no lo hemos descubierto hasta ahora?- Ora apagó su varilla en un cenicero cercano y se incorporó de la silla.
- La probabilidad es del 0,7% pero si la condicionamos a que la Unidad de Análisis Exhaustivo haya sido inspeccionada siguiendo todos los protocolos y se confirme que esta no esta dañada y por tanto sus datos son correctos entonces asciende a un 49,1%-
Ora estaba perplejo, se hizo el silencio un momento hasta que este acertó a preguntar:
-¿Qué otro o otros sucesos significan el resto del porcentaje?-
- Suceso no catalogado en los Bancos de Experiencia del programa RR – contestó Janis sin infligir ningún tipo de emoción a su voz aunque Ora juraría haber sentido cierto rin tintín en el tono usado por su ordenador personal y así, como si este de repente se diese cuenta del efecto que causaban sus palabras, añadió:
- Le recuerdo Supervisor Sayid que estos últimos porcentajes vienen dados por el uso del programa RR y por consiguiente están fuera de los estrictos principios que cumplen todo modelo probabilístico y mis conclusiones pueden ser total o parcialmente erróneas.
- Es decir mi querida Janis, hemos llegado a un callejón sin salida- Ora se volvió a recostar en su silla y cogió la media varilla que había apagado anteriormente con la intención de volverla a encender-
Janis no contestó.
-Envía el informe de la UAE y el resto de tus conclusiones al Director Fontaine y respóndeme a una pregunta… ¿Es posible que hubiese vida humana en la Tierra desde el principio, es decir que ninguna nave extraña y fuera del proyecto LIFE pudiese haber iniciado la recolonización antes que nosotros?-
- Si añadimos la posibilidad de que todos los informes traídos por las UAE desde el inicio del proyecto LIFE estaban equivocados sobre este aspecto, entonces si es probable-
Ora calló y miró con mala cara a la pantalla de su ordenador: “Hoy te levantaste con ganas de complicarme la vida”
El resto de la mañana Sayid trabajó en otras partes del informe como la mineralogía del suelo o las fotos tomadas del paisaje terrestre.
Se había descubierto que ciertas plantas primitivas sobrevivieron a la hecatombe bacteriológica que vivió la Tierra hace 400 años e incluso ciertos insectos como las cucarachas vivían con normalidad alimentándose de estas.
No se sabe todavía porqué pero la bacteria causante de tal apocalipsis provocó mutaciones en este tipo de insectos que aumentaron enormemente de tamaño: sobre un metro de largo y sesenta centímetros de ancho. Una barbaridad si tomamos por referencia el tamaño que tenían las cucarachas en el siglo XX.
Desde hacía doscientos años los supervisores de la Estación Libertad trabajaban sobretodo en el estudio de esta peculiar biosfera y la posible adaptación del ser humano a la misma mientras se intentaba recrear la anterior desde los puntos de génesis de la estación Igualdad
Un par de horas más tarde Sayid contemplaba una foto del paisaje terrestre cuando sonó un pitido de su ordenador, se acercó a la pantalla y en letras grandes leyó Mensaje Recibido: Vic Fontaine.
Lo primero que notó el director general al despertarse era que su cabeza le daba vueltas y que tenía un aliento a perros. Se levantó pesadamente de la cama y se tomó tres duchas de vapor de agua, un desperdicio del que ya había sido amonestado anteriormente.
Preparó un café solo y se sentó ante su ordenador personal vestido únicamente con una toalla. Había un mensaje en la bandeja de entrada.
Tardó cuarenta y cinco minutos en leer todo el informe y las conclusiones del programa RR de Janis y otro cuarto de hora en reaccionar, pero finalmente llevado por la excitación contestó el mensaje y escribió otros dos a los directores generales de las otras estaciones; se levantó y fue junto Mite, “un loro de fábrica” creado en la estación Igualdad, otro de los privilegios de su puesto:
- Volvemos Mite, volvemos a la Tierra - el loro lo miró espasmódicamente y comenzó a repetir la frase de su amo “Volvemos a la Tierra, Volvemos Mite” provocando la estruendosa carcajada de Vic.
Ora había sido citado en el habitáculo del director, como era normal ya que puesto de trabajo y vivienda se fusionaban en la estación Libertad debido al escaso espacio del que se disponía. Conocía a Vic de otros encuentros y le parecía una persona capaz para el puesto aunque se había dado cuenta que sufría frecuentes cambios de humor, de la euforia a la tristeza pasando por el enfado así que no sabía como lo iba a encontrar este día y eso entumeció parcialmente su dedo índice mientras lo acercaba al timbre electrónico de la puerta de Vic.
Lo presionó y este lo identificó como Ora Sayid verificó su cita con Vic y se abrió.
El director le esperaba sentado en un sofá, esperándole, y en cuanto lo vio aparecer en el habitáculo le dedicó una sonrisa y se levantó a estrecharle la mano.
“parece que hoy esta de buen humor” reflexionó Sayid…
- Buenos días supervisor por favor siéntese – le invitó con un gesto amistoso – Si no le importa vayamos directamente al asunto-
Ora asintió con un gesto e hizo ademán de hablar pero fue interrumpido por la voz fuerte de Vic.
- Acabo de leer su informe y lo he enviado a los distintos directores de las otras estaciones; sin duda los datos de la UAE son confusos pero los tres hemos llegado a la conclusión de que se debe esclarecer esta incógnita. Asumo la responsabilidad total para este trabajo pues - comenzó incorporándose de su sofá y enlazando las manos-
- Estoy de acuerdo pero como usted sabe la posibilidad de la vida humana en la tierra viene dado por el programa RR que no está sujeto a ninguna directriz probabilística y por tanto pueden ser erróneas estas conclusiones –
- Es posible pero sin duda algo pasa ahí abajo y nuestro deber es averiguarlo, supervisor – a Ora no le estaba gustando nada la reunión, no había un porqué claro pero había algo en el ambiente que le hacía presentir un cambio y los cambios no son buenos –
- He ordenado que la UAE vuelva a ser revisada- Ora respiró “es lo lógico” se dijo asimismo – y he decidido utilizar mi categoría de Director General de la Estación para ordenar el envío de una nave tripulada a investigar el extraño fenómeno si se vuelve a verificar que la unidad de análisis está en perfectas condiciones –
Los ojos de Ora se abrieron como platos y tardó un segundo en que su cerebro asimilase lo que acababa de oír:
- Director… sabe que esa UAE ya ha pasado por los protocolos de revisión y mantenimiento y está perfecta así que lo más posible es que se envíe una nave sin saber realmente lo que hay poniendo en peligro vidas humanas y recursos escasos de la estación con su permiso creo que es una temeridad – respiró - ¿No sería preferible esperar al envío de la siguiente UAE?
Vic miró fijamente a su mejor supervisor y la cara afable y contenta que este había visto se difuminó dejando paso a una mueca de desagrado y enfurecimiento…
- ¿Esperar?- casi gritó – ¡Llevamos cuatrocientos años enlatados y flotando en el espacio esperando, Sayid! Esperando que un maldito chisme de metal con forma de supositorio nos traiga unos datos diferentes a todos los anteriores y que nos permita bajar estos tres cacharros y volver a empezar en el lugar de donde venimos, ¿Entiendes?
- Si, pero con todos mis respetos…
- ¡Que respetos ni que puñetas!- gritó Fontaine al levantarse bruscamente del asiento- Conoces perfectamente la Directriz 3 ¿No? “Los procedimientos de regreso solo podrán tener lugar en caso de la recepción de un informe favorable del estado terrestre” y este, por muy confuso que parezca, puede ser un informe favorable y por ello me siento capacitado para enviar a la Tierra la primera nave tripulada desde que comenzó el Proyecto LIFE.
- Conozco las directrices señor, pero creo que se está dejando llevar por la euforia y los niveles de contaminación bacteriológica siguen siendo muy peligrosos y podríamos perder a la tripulación y recursos importantes en tal empresa, recomiendo…- intentó explicar atropelladamente ora cuando el ordenador de Vic emitió un pitido que interrumpió la conversación. Este se acercó un momento miró la pantalla y acto seguido desvió su mirada a su huesped.
- La UAE a superado la revisión de la computadora E.L.I.A. Sus resultados son reales y su programa RR ha dado las mismas conclusiones que su ordenador personal, Ora - dijo despacio y tranquilamente paladeando cada una de las palabras -La decisión está tomada Sayid, espero que la acepte.
Ora se levantó bruscamente y se dirigió a la puerta:
- Creo que es una temeridad director y no apruebo su decisión, solo espero estar equivocado y que no pese sobre usted las posibles y fatales consecuencias de enviar a la Tierra una nave tripulada - avanzó un poco y la puerta se abrió.
- Supervisor- comenzó tímidamente Fontaine - quería que usted pilotase esa nave- espetó Vic a la espalda de Ora. Este se paró un momento y se dio la vuelta.
-¿Por qué? – miró perplejo a su director –
- Antes de tomar posesión de su puesto como supervisor usted fue un piloto de carguero con amplia experiencia y de esta forma se reúnen en usted dos requisitos para esta misión, por una parte sabrá pilotar eficientemente la nave y por otra conoce los procedimientos de investigación –
- ¿Así no tiene que enviar a nadie más no?- preguntó sarcásticamente Sayid – Así no pesaran tantas muertes sobre si mismo, ¿no es así?-
Fontaine no contestó y se hizo el silencio en el habitáculo durante unos segundos hasta que un loro parlanchín decidió interrumpir con el chasquido de su pico.
- ¿Conoce a Osver? – se acercó Fontaine, hasta casi rozar nariz con nariz, a Ora y este negó con la cabeza – Es un escritor de mediados del siglo XXI que cuando estaba en la cumbre de su carrera dejó de escribir y un par de años después en una entrevista le preguntaron el porqué. ¿Sabes que respondió?: “Llevo diecinueve años de mi vida encerrado en mi casa imaginándome historias y lugares fascinantes y decidí que era hora de ver esos lugares y vivir esas historias, decidí que era hora de cambiar”. ¿No cree que así es como deberíamos sentirnos todos nosotros? ¿No cree que es hora de sacrificarnos para poder dejar de imaginar y empezar a vivir como hizo Osver?
Ora callaba y su semblante se había vuelto serio y pensativo como si estuviese atrapado por un embrujo.
- Piénselo y mañana a la mañana comuníqueme su decisión ya que las condiciones perfectas para el envío de una nave se darán dentro de dos días si no tendremos que esperar un mes y medio. Tómese el día libre si lo precisa supervisor Sayid.
Ora no pudo sacarse las palabras de Vic de la cabeza en todo el día y aunque le parecía una locura no podía dejar de pensar en la posibilidad de bajar a la Tierra y pisar el suelo de un lugar que solo existía en fotos y en sus sueños.
Pasaron las horas y no conseguía tomar una decisión. Acabó recostado en la cama a altas horas de la mañana cuando Janis le interrumpió:
- Supervisor detecto constantes vitales anómalas en su organismo que me indican que padece de insomnio si quiere puedo facilitarle música relajante y encontrará somníferos suaves en el botiquín -
Ora se incorporó y miró a la Cabina de Protección. Era una cabina con un asiento con amarres que toda habitación de la estación Libertad disponía. A todos le enseñaban en la escuela como abrocharse bien en ella y que técnicas usar para evitar la ansiedad y otros problemas que puedan surgir en el descenso de las estaciones a la Tierra. La verdad es que era lo más inútil que había en cada habitáculo y mucha gente le tenía asignada otra función, en el caso de Ora había instalado una diana en la puerta de la cabina con la que se relajaba disparando dardos. Era una diana vieja de algún supervisor anterior a él que había ocupado su habitáculo “¿Cuántos años tendría?” se preguntó obviando sus pensamientos durante un momento.
- Janis busca en tu base de datos todas las publicaciones en las que se describa el
planeta tierra –
- Supervisor hay 13467532 entradas que responden a su parámetro-
- Elige una Janis y léela – se volvió a recostar y encendió una varilla –
- Oficial del Imperio Británico: Douglas Willkinson. Entrada de su diario 02051873: Mi amada Cler me hallo en medio de la nada y el todo sentado entre las hierbas de un continente apenas conocido y mirando al lejano horizonte. Escucho las olas del mar batiendo contra las costas vírgenes de un mundo desconocido, la brisa acaricia mi piel como tus dedos lo hacían en nuestro lecho y oigo a los pájaros de esta isla cantando nuestra llegada. Detrás de mí unas montañas imponen su autoridad en este refugio de la naturaleza; son de color azabache bajo esta luz del atardecer… A pesar de todas las miserias del viaje solo por este momento siento que mereció la pena anotarme a esta expedición…
Janis percibió que Sayid se había quedado dormido plácidamente y paró la reproducción.
A la mañana siguiente Ora abrió los ojos de golpe como si se hubiese asustado de haberse quedado dormido y se quedó mirando al metálico techo de su habitáculo.
Deseó poder ver aquellos pájaros, notar la brisa y oír el mar… ya había tomado una decisión y no se había dado cuenta de cuando y como lo había hecho; era como un instinto primario que le decía que el hombre necesitaba poder perder la vista en el horizonte…
Era una sensación extraña de necesidad de algo que no había necesitado jamás y que curiosamente solo podía llamarla de una forma: Libertad.
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